De las obras, el misterio: Shhhh.... Homenaje a Julieta Lanteri

IMAGENES A LA DERIVA - Obra de Néstor Tellechea

Apuntes:

Mi letra viaja, y nunca lo sabe. Cada gota de lluvia que se muere, se suma a la tela de agua que corre ondulándose sobre la calle en pendiente. Ojos cerrados a lo conocido, para que lo conocido organice la otra existencia de lo que desconocía que quería decir. Todo lo que se ve, a veces necesita ser cuidado, hasta saturándolo de silencio. Hojas que se mueven como llamándome por nada. Vivir palabras. El fondo y la piel de lo devenido. La Poesía me depara un intrincado refugio de sedosas complejidades y desaciertos. Algo me espera por dentro, y predice denigrarse en palabras, mientras finge un rumor atormentado por mí. El recurso ilusionado en el instante. Mi sufrimiento de palabras. Cuando empiezo a sentir un poema que todavía no existe, veo/vivo, con todo lo que soy, una agradable soledad con el descubrimiento. Sí. Estaba yéndome otra vez demasiado hacia mí mismo, y la poesía me paró. Pasarle el cuerpo de la vida, a las palabras. Nunca al revés. Dejar bien vecino los dedos de las manos sobre los ojos cerrados, para serle más confiable a eso que venía desde mí, para que yo deje escrito lo que él está asomando desde mí en palabras. Sí. El relámpago de lo que veo escribiendo, mientras camino. El sol habla. La luna habla. La noche. La mañana. Desde que era muy chico, creo. El agua de su espuma, es la Poesía.

viernes, 17 de octubre de 2008

Shhhh.... Homenaje a Julieta Lanteri

Hilda Paz, Viviana Sasso, Alicia Silva Rey

INAUGURACION: 7 DE NOVIEMBRE A LAS 18

1º al 30 de Noviembre de 2008

En Buenos Aires, Argentina en el Centro Popular de la Boca Norberto y Arrigo Todesca y en Olot, España en Museu Comarcal de la Garrotxa

por fuera del exilio,

del miedo,

como escribir ser fuerte

y que serlo y decirlo

la misma cosa

sean,

y lentamente,

no se mida como ganancia

o pérdida,

ser insertados

en el tiempo de unas imágenes

en las que no desconcierte

persistir

Alicia Silva Rey

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Los días y las cosas - Por Néstor Tellechea

“… El reloj
no mide. Trabaja
en el vacío: su voz se desliza
fuera de los cuerpos…”

José Ferreira Gullar

La queja suave y alargada de unas hojas a las que las empuja una y otra y otra vez el viento. Una nube que se modifica guardándose hacia adentro de sí misma. El exacto momento en el que una lágrima se deshace contra el suelo. La marcación arqueada de un trébol que interrumpe o provoca el paisaje de un recuerdo. Lo intimo. Lo compartido. La certeza de una irrealidad. Los estallidos de un presentimiento en la sensibilidad. La cosa inabarcable de un intersticio de belleza casual. Números, fechas que vuelven a hacer posible que me de cuenta más o menos de en qué forma sigo estando vivo. El ser lo mejor o lo más triste del que sigo siendo frente al latido visual de una estrella. Un hilo de sombra de lluvia. Las complicaciones felices y todo lo contrario. La primera y la última visita a lo que desconocía o no esperaba conocer. Saber que nunca voy a dejar de pertenecerles ni a mis amigos, ni a mis enemigos, ni al mayor semejante de todo lo que dure la vida universal…
Monstruo indispensable para que yo haya nacido y mañana como ayer y hoy haya transformado a mi persona en siglos, años, meses, horas o segundos de su inmortalidad, tratando de sentir humanamente la idea remota de su dimensión, cuanto más me dejo llevar por él hacia mí, con los ojos encerrados en esa música inaudible que a veces genera la enorme suavidad del silencio que se remonta a no sé cuánta acumulación de poder inmóvil que lo puede todo… Sin ir más lejos, haber hecho aparecer a estas palabras debajo del correr oleado de mi sentimiento, no bien quedan anotados los sonidos que desde el vamos le pertenecieron al pasado que se está leyendo en este mismo instante, quién sabe qué ojos, qué ganas, qué desilusión o alegría que puede generar haber tenido el privilegio de vivir algún detalle que al terminar su vida, se nos hace para siempre extraordinario y sensiblemente más perdurable que el que lo presenció, gracias a la hermosa causalidad de pertenecerle al tiempo…

Para no olvidar

"El peor analfabeto es el analfabeto político. El no oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. El no sabe que el precio del poroto, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas. El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales."
Bertolt Brecht

Viviana Sasso

Nacida en Buenos Aires en 1964. Estudia diseño publicitario, pintura, grabado y escultura. Participante de muestras individuales y colectivas desde 1992, en nuestro país y a nivel internacional, entre las que se destacan: 50º Aniv. de los Derechos Humanos - Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires; Desaparición e Identidad – C.C. Recoleta ; Miradas y silencios sobre Rosa Luxemburgo junto con H.Paz - Cedinci ; Rostros, Museo de Artes Visuales Víctor Roverano; Homenaje a poetas rusos – junto con H.Paz y N. Tellechea – Cedinci; IV Bienal Nacional de Grabado en Relieve - Museo Nacional de Grabado; 6to. Salón Mercosur Diógenes Taborda; 2da. Muestra Internacional de Miniprint Rosario ; Zona de derrumbe - Museo de Artes Visuales Victor Roverano ; Hombres de palabra – SFGB. Participaciones internacionales en España, Italia, Canadá, Japón, Panamá, México, Brasil.

De las obras, el misterio